A mi, que no me lleven a Nueva York.
A mi, que me encojan.
Así veré mis ciudades imaginadas.
A tamaño natural.
El otro día me encontré con esta ciudad.
Si Calvino la viera. Que explicaría.
Yo me dije un calorcito.
Y sería una ciudad para plantas temblorosas.
Transparencias sutiles para resguardar la intimidad.
Formas imperfectas para evitar el aburrimiento.
Sombras necesarias para despertar al peatón.
Suelo "radiante" que alberga y la raíz, se pasea descalza.
Y la planta temblorosa.
Respirando desde abajo y hacia arriba.
Tranquila. Punto. Contenta. Punto.
Lo mejor?
En verano.
Cuando el rascacielos pesa y sobra.
Se quita.
Porque es de quita y pon.
Y la planta luce al aire fresco y al rocío mañanero.
Es, una de las muchas arquitecturas agrícolas.
Lo lógica de lo necesario.
Recapaciten rascacielos para humanos transparentes...
Clara Nubiola
rascacielos a escala para humanos transparentes.. esas si son ciudades! que chulo Clara... Abrazos!
ResponderEliminarIngrid ;) ! Super ciudades naturales.... Aquí también encontraríamos periferias.. Besos!
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