*
De la última vez que estuve en Bombay hace ya un tiempo.
Las fotografías, guardadas desde entonces en un mi ordenador.
Hoy vuelven pensando en pieles.
La piel de un edificio.
Retocar o envejecer.
Mantener o operar.
El edificio es como un cuerpo.
Bien cuidado, envejecerá dignamente.
Adquiriendo pátinas y arrugándose sabiamente.
Conservarlo significa respetar el paso del tiempo.
La cirugía plástica sería matarlo.
Entrar en un quirófano y salir siendo otro.
Manipulado por una eterna juventud.
Edificios repintados con cien capas.
Sin rastro de historia más que en algunas formas.
Eso no es seguir siendo.
Eso es ser otro.
Luego hay quien abandona.
Y los edificios mueren.
Prematuramente.
En Bombay es así.
Las causas claras.
El cuerpo puede hacer deporte.Con los edificios, conservar no es gratis.
Aún así, se presentan fotogénicos.
Un caos de fotogenia.
De ventanas desiguales, ropas al aire, aires acondicionados en colmena y pinturas al gusto.
Yo, para variar, miro y digo bonito.
Pieles y edificios.Hoy, presento.
Clara Nubiola
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.